Con la charlatanería, las ofertas, descalificaciones y lindezas que acompañan las campañas electorales, la clase política aburre al ciudadano.
Nadie cree en las promesas y programas, porque la gente está escaldada de incumplimientos y mentiras de unos y otros.
¡No es para menos!
Y así estos días en que se aproxima el 9-M, la buena salud ciudadana se presenta burlona vendiendo votos en subastas como Ebay.
En otros paises lo hacen más en serio.Por ejemplo:
Los candidatos a las elecciones de Tailandia pagan a los ciudadanos con estas pastillas para conseguir su apoyo.
Pagar el voto de la gente en pastillas de Viagra es el método al que ahora recurren algunos candidatos que se presentan a las elecciones al Parlamento de Tailandia, un país donde las papeletas siempre tuvieron precio.
Atrás quedó el dinero, los saquitos de arroz, camisetas, ventiladores y otros objetos que los candidatos con presupuesto y sus cuadrillas de apoyo, repartían entre los tailandeses como pago por su voto cada vez que había que ir a las urnas.
No es ahora el caso, pero en el año 1999 promovimos algo parecido.